Hola, esta historia será larga, tendrá mucho contexto pero espero puedan darme una opinión; conocí a un hombre 11 años mayor cuando tenía 17 años, comenzamos una relación a distancia muy bonita, hablábamos todo el tiempo y el siempre estaba muy pendiente de mi, realmente me hizo ver la vida de una forma diferente, pasaron los años, el quería que me fuera a vivir a su país pero apenas había salido del colegio y comenzó el COVID ademas no quería romperle el corazón a mis padres por todo su esfuerzo así que le pedí un año más para estudiar y trabajar, así lo hice, trabaje mucho y cuando ya todo se calmó con el COVID pusimos una fecha exacta de mi viaje, enero de 2023, en marzo de 2022 ya estaba tramitando mi pasaporte y mi mamá ya había hablado un tiempo con el así que estaba un poco más tranquila con la idea de irme, le avisé a mi mamá que me iría y vendería todo, ella se preocupó pero lo acepto, pero solo un mes después de que estaba tramitando mi pasaporte mi suegra me llamo, me dijo en lágrimas que él había sufrido un accidente y que no sabían cómo estaba, no sabían que estaba pasando y que quería contarme porque sabía que no podrían ocultarlo mucho tiempo, fue terrible escuchar eso, nisiquiera recuerdo si respondí algo, salí de mi trabajo a la casa, me senté en silencio hasta que me llamo un hermano de el, me dijo que querían que fuera a verlo, que el quería que estuviera a su lado, yo sin dudarlo le dije que si, le avisé a mis padres y acomode todo y una semana después ya estaba con el, fue maravilloso verlo, estaba mal porque se fracturó la columna y había acabado de tener su operación pero estaba vivo y era todo lo que podía pedir, estuvimos muy felices, el quedó en silla de ruedas así que su vida cambió mucho, yo estuve con él para todo, le hacía terapia todas las mañanas durante una hora, le hacía el desayuno, lo bañaba, le ayudaba con sus necesidades, le lavaba la ropa y lo animaba lo más que podía, jugábamos juegos de mesa, veíamos películas, le insistí para que me enseñará a manejar hasta que lo convenci y sola lo subí al carro y pude parquearlo solo con lo que me decía, fueron días muy bellos pero habian detalles que luego se convirtieron en problemas que hicieron que todo terminará; el tenía una esposa antes de mi y dos hijos, me sentía emocionada de conocer a los niños pero al mismo tiempo no me sentía nada bien sobre su esposa, me gustaría decir ex esposa pero aún no se han divorciado, ese fue el mayor de los problemas, ya habían pasado muchos años separados y aún no arreglaban su divorcio, yo tuve paciencia porque siempre le pregunté si quería regresar con ella por los niños pero me lo negó así que le creí, viviendo con él mientras lo cuidaba tuvimos esos pequeños detalles, los primeros dos meses que estuve allá me presento con todos como si fuera una amiga, el es muy religioso así que entendí la situación y me aguante, también que mi querida suegra lo trataba como un niño y eso me enojaba bastante, un hombre de 32 años siendo vigilado por la mamá me parece algo inaudito, me regañaba por todo y por nada que porque no eran cosas de Dios; el papá en una pelea me dijo que era una inservible, que me comportará y le dijo a el que me enseñará modales como si fuera un perro porque no quise guardar unas ollas que yo acababa de lavar y estaban muy mojadas, llore y estaba triste, el dijo que podía devolverme a mi país si no me sentía bien pero yo estaba para cuidarlo a el entonces deje pasar que el padre me hablara así, tuve muchos problemas por cosas que nunca en mi vida pensé que me regañarian, por una almohada que puse en la pierna de el que porque lo podría lastimar, ja, increíble como intentaron colmarme la paciencia, resistí mucho y luego jugando en el celular de el tuve una competencia con una muchacha y al entrar al chat vi que la halagaba y le decía lo hermosa que era, peleamos pero todo se arregló muy fácil, pero simplemente no quede así, tenía esa espina cada vez más clavada así que un día decidí revisarle el celular, encontre conversaciones muy morbosas con dos señoras y lo que más me dolió una conversación con su ex pidiendole que volvieran, que quería estar con ella, todo eso solo unos meses antes de su accidente, me dolió el corazón, sentí un sudor frío y de repente solo estaba llorando sin parar, mis suegros me encontraron en ese momento, les mentí y les dije que solo extrañaba mi país, me dieron consejos mientras yo me derrumbaba, me dolía muchísimo y al mismo tiempo lo amaba tanto que no quería que mis suegros supieran lo que él hizo, salí de esa habitación y fui a hablar con el, le pregunté porque me haría algo así, porque pensaría en desecharme cuando yo lo amaba tanto, cuando daría mi vida por el, se disculpó, dijo que era un error y que no lo haría otra ves, yo no podía pensar, me sentía mareada, temblaba y lloraba, como no respondí dijo que si no lo perdonaba que terminaramos y cada quien por su lado, impresionante! Para el era como cambiarse de ropa, le pregunté si realmente el sentía algo por mi, dijo que si, que porfavor lo perdonara y lo intentaramos, acepte pero en las noches lloraba, me sentía totalmente apagada, seguí cuidándolo con mucho amor pero a veces sentía el peso de su traición, su familia no ayudaba porque eran muy amables conmigo y de un momento a otro crueles, así que le puse una condición, quería que resolviera el divorcio y que de alguna forma viviéramos aparte si todo iba enserio así yo olvidaria todo, el acepto y yo me devolví a mi país luego de 9 meses cuidándolo, apenas llegué conseguí trabajo y comencé a ahorrar, seguimos planeando nuestra vida y le dije que porfavor resolviera lo del divorcio, estuve 10 meses diciéndole como iba con eso, muchas veces dijo que se le olvidó, que el abogado no le respondía, que era difícil y excusas asi, los hijos fueron a visitarlo y tuvo que encontrarse con su esposa y ni así le entrego los papeles de divorcio, eso fue el límite para mi, todas las mañanas amanecía de mal humor, con dolor de cabeza, tenía pesadillas o definitivamente no podía dormir nada, tuve paciencia dos meses más y explote, le dije que terminábamos definitivamente, el no lo tomo nada bien, intento casi que comprarme diciendo que pondría una casa a nombre mío y le dije que eso no me interesaba para nada, luego dijo que pensara en nuestro matrimonio y le dije que como si nisiquiera estaba divorciado, todo lo que me decía se derrumbaba porque eran cosas que él no cumplió, ya cuando notó que nada funcionaria conmigo dijo que era una bruja, perra traidora, que él sabía que solo lo estaba utilizando y que lo engañaría en cualquier momento y que por eso me tenía escondida, que nunca lo quise y que solo fue un juego para mi, enserio? No pude creer que se atreviera a decir tanto cuando estuve en todo momento con él y no es capaz de aceptar sus errores y ser realmente hombre para ver cómo me lastimó; siguió así por muchos días, diciendo que lo deje por parapléjico, que seguro volvería cuando el se recuperará, que fui la peor en su vida y enserio me preguntó soy tan mala? Yo enserio no quería dejarlo, pelie con mi familia durante muchos años por estar con el, vi como mi mamá ese año nuevo de 2023 lloro porque no estuve a su lado, sacrifique mucho por el y él dice eso de mi como si nada, entonces se supone que debía darle otra oportunidad? O que creen que el esperaba de mi, no entiendo ese hombre que quería de mi
PSD: después de terminar he tenido contacto 0 con el y realmente me he sentido tan tranquila, luego de terminar sentí que ya no debía preocuparme por su divorcio, por su familia, por más excusas, todo se fue y llore unos días pero luego realmente me sentí libre, mi plan por ahora va bien porque compre un lote y estoy ahorrando para la construcción

Hola, esta historia será larga, tendrá mucho contexto pero espero puedan darme una opinión; conocí a un hombre 11 años mayor cuando tenía 17 años, comenzamos una relación a distancia muy bonita, hablábamos todo el tiempo y el siempre estaba muy pendiente de mi, realmente me hizo ver la vida de una forma diferente, pasaron los años, el quería que me fuera a vivir a su país pero apenas había salido del colegio y comenzó el COVID ademas no quería romperle el corazón a mis padres por todo su esfuerzo así que le pedí un año más para estudiar y trabajar, así lo hice, trabaje mucho y cuando ya todo se calmó con el COVID pusimos una fecha exacta de mi viaje, enero de 2023, en marzo de 2022 ya estaba tramitando mi pasaporte y mi mamá ya había hablado un tiempo con el así que estaba un poco más tranquila con la idea de irme, le avisé a mi mamá que me iría y vendería todo, ella se preocupó pero lo acepto, pero solo un mes después de que estaba tramitando mi pasaporte mi suegra me llamo, me dijo en lágrimas que él había sufrido un accidente y que no sabían cómo estaba, no sabían que estaba pasando y que quería contarme porque sabía que no podrían ocultarlo mucho tiempo, fue terrible escuchar eso, nisiquiera recuerdo si respondí algo, salí de mi trabajo a la casa, me senté en silencio hasta que me llamo un hermano de el, me dijo que querían que fuera a verlo, que el quería que estuviera a su lado, yo sin dudarlo le dije que si, le avisé a mis padres y acomode todo y una semana después ya estaba con el, fue maravilloso verlo, estaba mal porque se fracturó la columna y había acabado de tener su operación pero estaba vivo y era todo lo que podía pedir, estuvimos muy felices, el quedó en silla de ruedas así que su vida cambió mucho, yo estuve con él para todo, le hacía terapia todas las mañanas durante una hora, le hacía el desayuno, lo bañaba, le ayudaba con sus necesidades, le lavaba la ropa y lo animaba lo más que podía, jugábamos juegos de mesa, veíamos películas, le insistí para que me enseñará a manejar hasta que lo convenci y sola lo subí al carro y pude parquearlo solo con lo que me decía, fueron días muy bellos pero habian detalles que luego se convirtieron en problemas que hicieron que todo terminará; el tenía una esposa antes de mi y dos hijos, me sentía emocionada de conocer a los niños pero al mismo tiempo no me sentía nada bien sobre su esposa, me gustaría decir ex esposa pero aún no se han divorciado, ese fue el mayor de los problemas, ya habían pasado muchos años separados y aún no arreglaban su divorcio, yo tuve paciencia porque siempre le pregunté si quería regresar con ella por los niños pero me lo negó así que le creí, viviendo con él mientras lo cuidaba tuvimos esos pequeños detalles, los primeros dos meses que estuve allá me presento con todos como si fuera una amiga, el es muy religioso así que entendí la situación y me aguante, también que mi querida suegra lo trataba como un niño y eso me enojaba bastante, un hombre de 32 años siendo vigilado por la mamá me parece algo inaudito, me regañaba por todo y por nada que porque no eran cosas de Dios; el papá en una pelea me dijo que era una inservible, que me comportará y le dijo a el que me enseñará modales como si fuera un perro porque no quise guardar unas ollas que yo acababa de lavar y estaban muy mojadas, llore y estaba triste, el dijo que podía devolverme a mi país si no me sentía bien pero yo estaba para cuidarlo a el entonces deje pasar que el padre me hablara así, tuve muchos problemas por cosas que nunca en mi vida pensé que me regañarian, por una almohada que puse en la pierna de el que porque lo podría lastimar, ja, increíble como intentaron colmarme la paciencia, resistí mucho y luego jugando en el celular de el tuve una competencia con una muchacha y al entrar al chat vi que la halagaba y le decía lo hermosa que era, peleamos pero todo se arregló muy fácil, pero simplemente no quede así, tenía esa espina cada vez más clavada así que un día decidí revisarle el celular, encontre conversaciones muy morbosas con dos señoras y lo que más me dolió una conversación con su ex pidiendole que volvieran, que quería estar con ella, todo eso solo unos meses antes de su accidente, me dolió el corazón, sentí un sudor frío y de repente solo estaba llorando sin parar, mis suegros me encontraron en ese momento, les mentí y les dije que solo extrañaba mi país, me dieron consejos mientras yo me derrumbaba, me dolía muchísimo y al mismo tiempo lo amaba tanto que no quería que mis suegros supieran lo que él hizo, salí de esa habitación y fui a hablar con el, le pregunté porque me haría algo así, porque pensaría en desecharme cuando yo lo amaba tanto, cuando daría mi vida por el, se disculpó, dijo que era un error y que no lo haría otra ves, yo no podía pensar, me sentía mareada, temblaba y lloraba, como no respondí dijo que si no lo perdonaba que terminaramos y cada quien por su lado, impresionante! Para el era como cambiarse de ropa, le pregunté si realmente el sentía algo por mi, dijo que si, que porfavor lo perdonara y lo intentaramos, acepte pero en las noches lloraba, me sentía totalmente apagada, seguí cuidándolo con mucho amor pero a veces sentía el peso de su traición, su familia no ayudaba porque eran muy amables conmigo y de un momento a otro crueles, así que le puse una condición, quería que resolviera el divorcio y que de alguna forma viviéramos aparte si todo iba enserio así yo olvidaria todo, el acepto y yo me devolví a mi país luego de 9 meses cuidándolo, apenas llegué conseguí trabajo y comencé a ahorrar, seguimos planeando nuestra vida y le dije que porfavor resolviera lo del divorcio, estuve 10 meses diciéndole como iba con eso, muchas veces dijo que se le olvidó, que el abogado no le respondía, que era difícil y excusas asi, los hijos fueron a visitarlo y tuvo que encontrarse con su esposa y ni así le entrego los papeles de divorcio, eso fue el límite para mi, todas las mañanas amanecía de mal humor, con dolor de cabeza, tenía pesadillas o definitivamente no podía dormir nada, tuve paciencia dos meses más y explote, le dije que terminábamos definitivamente, el no lo tomo nada bien, intento casi que comprarme diciendo que pondría una casa a nombre mío y le dije que eso no me interesaba para nada, luego dijo que pensara en nuestro matrimonio y le dije que como si nisiquiera estaba divorciado, todo lo que me decía se derrumbaba porque eran cosas que él no cumplió, ya cuando notó que nada funcionaria conmigo dijo que era una bruja, perra traidora, que él sabía que solo lo estaba utilizando y que lo engañaría en cualquier momento y que por eso me tenía escondida, que nunca lo quise y que solo fue un juego para mi, enserio? No pude creer que se atreviera a decir tanto cuando estuve en todo momento con él y no es capaz de aceptar sus errores y ser realmente hombre para ver cómo me lastimó; siguió así por muchos días, diciendo que lo deje por parapléjico, que seguro volvería cuando el se recuperará, que fui la peor en su vida y enserio me preguntó soy tan mala? Yo enserio no quería dejarlo, pelie con mi familia durante muchos años por estar con el, vi como mi mamá ese año nuevo de 2023 lloro porque no estuve a su lado, sacrifique mucho por el y él dice eso de mi como si nada, entonces se supone que debía darle otra oportunidad? O que creen que el esperaba de mi, no entiendo ese hombre que quería de mi
PSD: después de terminar he tenido contacto 0 con el y realmente me he sentido tan tranquila, luego de terminar sentí que ya no debía preocuparme por su divorcio, por su familia, por más excusas, todo se fue y llore unos días pero luego realmente me sentí libre, mi plan por ahora va bien porque compre un lote y estoy ahorrando para la construcción

Eso. Los perros de mi familia consumen pedigree adulto hace más de 20 años, ya 2 generaciones aproximadamente, pero últimamente note/pienso que la calidad disminuyó y quizás haya mejores opciones por un precio similar o ligeramente mayor. Actualmente, el bolsón de 21kg cuesta 44k y les dura un mes (ya que les mezclamos con arroz, verduras y una que otra comida apta), me gustaría comparar otras marcas hasta un precio de 60k.
Datos de color: son cuatro jubilados que no superan los 16kg cada uno; hay un quinto jubilado que ya consume $Royal Canin así que descartamos esa marca; cocinarles estrictamente pollo, verduras, etc no resulta sostenible ya que estudio/trabajo y a penas consigo cocinarme, y nadie en mi familia se tomaría esa responsabilidad.

Escritores Uruguayos

En el barrio solo había dos niños: Tairon y Tobias. Podíase verlos jugar juntos en todo momento, ya fuese en la escuela, junto al río, recorriendo los interminables callejones del barrio o, muy de vez en cuando, en la casa de Tobias. No compartían sangre ni siquiera se parecían el uno al otro, mas eran hermanos. Fue por ello que Tairon pudo hacerse un lugar en la familia de Tobias. Tairon creció sin padres, y miraba con altanería a cualquier tipo de autoridad, salvo a Tiffany. Admiraba profundamente a esa mujer y a menudo soñaba que le adoptaba, permitiéndole al fin ser ese hermano que Tobias nunca tuvo. Muy temprano, cuando el sol apenas hacía intentos de salir, salieron a buscar leña, esperando sorprender a la familia de Tobias, el menor de los dos, dejando el fogón encendido a primera hora, pronto para calentar el famoso chocolate caliente de la señora Tiffany. Salieron en silencio, pues no podían decir a nadie o arruinarían la sorpresa, lo cual aterraba a Tobias, temeroso de ocultar cosas a su familia. Tairon no le dio importancia. En lo único que podía pensar era en ese preciado chocolate caliente, cuyo aroma aún se colaba en sus sueños, evocando el impecable y dulce sabor de inviernos pasados. Bajaron el empinado camino de piedra que cruzaba junto al enrejado patio del convento, desviándose por una arbolada que llevaba hasta la orilla del río. No hacía mucho, esta orilla había sido podada para que los caballos pudiesen beber, así que solo tenían que recolectar las ramas secas. Aun así, Tairon llevaba su facón bien ceñido a la cintura. Esto se debía a que Tairon, el mayor de los dos, había encontrado en la parte alta del cerro, cerca de la zona más alejada detrás del viejo recinto de mujeres, un árbol de coronilla. Llevaba meses guardando este secreto para un día frío como aquél y lo ocultó a Tobias por miedo a que robara su idea o divulgara la información. Alguien podría robarle su árbol, y no podía tomar ese riesgo, pensó. Aún estaba muy oscuro para ver bien el camino. Tairon tomó la mano de Tobias y lo guió como quien ayuda a un niño a cruzar la calle. Tobias no ofreció resistencia alguna, pues Tairon solía hacer cosas como esta todo el tiempo, y se dejó llevar casi por reflejo. Siguieron un viejo sendero entre árboles espinosos, hasta llegar al borde de la pendiente. Muy arriba, parcialmente cubierto por los árboles, se veía el campanario. Ambos subieron con dificultades, quebrando algunas ramas. La empinada superficie del cerro, a espaldas de la gran posada, estaba tan forrada y resbalosa que incluso estando descalzo resultaba difícil treparla. Para suerte de Tairon, él casi siempre andaba descalzo, a diferencia de Tobias, quien subía con dificultades. La vivienda ahora parecía ser mil veces más grande, y su inmensidad crecía con cada paso. Casi en la cima, era tan inclinado que debían agarrarse de las ramas para no caer de espaldas. Pasaron los minutos y al fin se toparon con un gran muro de piedra que parecía infranqueable sin importar en qué dirección se mirase. Más que un convento, parecía un fuerte colonial, lo cual no era desconcertante, ya que había sido construido durante una época de conflicto como la del lejano 1812. —Ya no quiero estar aquí —dijo Tobias, con la voz temblorosa, ya fuese por el frío o por el miedo a contradecir a Tairon. —Debe estar cerca, recuerdo perfectamente dónde lo vi —dijo Tairon con un tono nervioso e inseguro. Caminaban apoyados en el muro trasero del lugar, agarrándose de las pequeñas imperfecciones en las piedras que conformaban la estructura. Cualquier desliz o ruptura de la deteriorada piedra significaría una cruel caída hasta los pies del cerro. Ambos sabían que morirían antes de dejar de rodar, mas esto no asustaba a Tairon, quien veía cada vez más cerca su premio. Los pequeños brazos de Tobias ya estaban cansados. El sol empezaba a salir y poco a poco el plan comenzaba a tambalearse, al igual que sus cansadas piernas. —Ya es tarde. Mis padres ya deben haberse levantado y, aunque no lo hubieran hecho, seguramente lo harán en el tiempo que nos toma encontrar, cortar y llevar ese maldito árbol. ¡Bajemos a buscar algunas ramas! —dijo Tobias con un tono furioso y ya mucho menos titubeante. —¿Acaso no te das cuenta? Ahora, con la luz del sol, será mucho más fácil encontrarlo. Cuando lleguemos, nos darán una recompensa enorme. ¿Acaso no es ese el punto? ¿Por qué rendirse ahora y dejar que todo esto haya sido una pérdida de tiempo? Quizás hasta verían mi verdadero valor y me adoptarían, como siempre debió ser. ¿No te gustaría que fuésemos hermanos de verdad? —respondió Tairon con un tono calmado y taxativo. —No hace falta que esperemos, esto ya es una pérdida de tiempo. Si bajamos a recolectar las ramas, podríamos recuperar algo del tiempo perdido. Las vi cuando entramos aquí. ¿Acaso no te das cuenta de que la recompensa sería la misma? Somos solo niños. Nos recompensarían aunque fuésemos con las manos vacías. Además, mi intención es hacer feliz a mi familia. No me importa ningún premio. No lo entenderías. Nunca te han amado de verdad. Alguien que solo piensa en recompensas por sus acciones nunca sería adoptado por mi madre. Aun así, no podemos darnos el lujo de alimentar otra boca, estás soñando despierto. Los he escuchado hablar. Ni siquiera quieren que esté contigo. Siempre me dicen... —Tobias no dejaba de refunfuñar y parlotear cada vez más fuerte. Empezaba a confesar todo lo que hasta el momento había ocultado por miedo, ya que el nuevo e inminente terror a morir rodando era mucho mayor que el miedo hacia Tairon, permitiéndole expresar con total fluidez todos sus pensamientos. Su voz resonaba en los oídos de Tairon como un molesto zumbido. De inmediato pensó en empujarlo, tomarlo por las manos y lanzarlo al vacío como un costal de huesos. Sería muy sencillo para él realizarlo, simplemente debía decir que tropezó por sí mismo o, mejor aún, fingir que nunca lo vio. Nunca encontrarían el cuerpo y no habría forma de vincularlo al asesinato. Rodaría, quebrándose los brazos, clavándose las ramas y espinas en el cuerpo hasta romperse la columna y terminar moribundo en el suelo. Por supuesto, fingiría buscarlo en esa zona y diría que allí no estaba. Podría hasta llorar su pérdida. Al final, tomaría el lugar de Tobias. No sería una boca más que alimentar, solo sería un intercambio, una forma de consolar la terrible pérdida de la familia. El resultado más lógico para todos. Sí, la idea se hacía cada vez más real en su mente. Cada pequeño detalle se tallaba entre los rincones más nauseabundos de su conciencia. De inmediato pudo verlo con claridad frente a él. Al fin todo había terminado. Podían poner fin a esto. Tairon giró su cuerpo para estar frente a Tobias. Tenía los ojos abiertos como dos grandes platos y una sonrisa horripilante de oreja a oreja. Su moreno rostro lleno de cicatrices era suficiente para asustar a Tobias, mas esa aterradora sonrisa le dejaba la piel de gallina. —¡Te lo dije, Tobias! Te dije que lo encontraría. Eres muy impaciente. Siempre haces lo mismo. ¿Debes sentirte como un idiota, no? No entiendo por qué siempre te empeñas en contradecirme. Te lo dije, todo lo que hace falta es un poco de luz —Tairon estaba casi gritando, sin poder evitar hacer siniestras muecas con la boca. Por su cara corrían largas gotas de sudor y casi se podía escuchar cómo su acelerado corazón latía. El corazón de Tobias latía aún más rápido, hasta que pudo entenderlo; todo había terminado al fin. Sintió un ligero alivio y se arrepentía en su interior por todo lo que había dicho. Al fin pudo verlo. Frente a sus ojos estaba el dichoso lugar. En el muro había un inmenso agujero, seguramente destrozado por pesada artillería durante la guerra. Al entrar, ambos lo vieron. El inmenso árbol era apenas un poco más alto que los ya inalcanzables muros de piedra. Su robusto tronco era tan grande que fácilmente una familia podía vivir en él. Sus alargadas ramas se entrelazaban en el aire y llegaban hasta los claustros, donde se enrollaban produciendo una sombra perfecta en el gigantesco patio del recinto. Metido dentro del inmenso árbol crecía un enorme árbol de coronilla. Mucho más modesto, por supuesto, pero sus ramas eran lo suficientemente gruesas como para alimentar bien el fuego. —Estás loco, Tairon. Ese árbol está en el patio del convento. ¿Cómo piensas cortarlo sin ser escuchado por las monjas? Es más, ni siquiera deberíamos meternos en este lugar. Solo haces que me meta en problemas. Si nos preguntaran de dónde sacamos la leña, estaríamos muertos —dijo Tobias, vociferando gritos de furia nunca antes suscitados por él. —Cállate, harás que nos descubran —dijo Tairon apresurado. —¿Qué creen que están haciendo? Este no es lugar para niños, váyanse de aquí antes de que llame a sus padres. ¿Acaso eres tú, Tobias? —clamó una ronca y muy silenciosa voz desde los claustros superiores. Tairon apenas pudo escuchar bien las palabras. En cambio, Tobias ni siquiera lo pensó. Intentó escapar sin entender del todo desde dónde lo veían o qué habían dicho exactamente. Solo había distinguido su propio nombre. Al decirlo, fue como si la mujer hubiese activado una parte de su cerebro que siempre estaba apagada. Una indescriptible energía surgió en su cuerpo, y la adrenalina corrió por sus venas como si hubiera sido directamente inyectada en su corazón. Corrió a través del muro, y fue ahí cuando recordó la increíble altura en la que se encontraba. Cerró los ojos y extendió sus manos, sabiendo que ya no había nada que hacer. Su última vista fueron unas piedras en forma de pico y un frondoso árbol de espinas. Tairon no movió ni un músculo. Escuchó el desgarrador grito de Tobias. Mientras sus manos temblaban y su piel se erizaba, podía escuchar claramente cómo crujían los huesos de su amigo, cómo la piel se desgarraba, cómo las articulaciones se torcían en posiciones inhumanas, mientras sus músculos se estiraban hasta desgarrarse y producir largos gemidos por toda su piel. En el mejor de los casos, pensó Tairon, esos solo serían los sonidos de ramas quebrándose y atravesando la delgada piel de su amigo como si fuera desgastada tela. El alarido y el llanto se hacían cada vez más tenues hasta que no hubo más que silencio. Tairon se sintió, por un segundo, aliviado al ya no escuchar esos horribles gritos de ayuda. Un segundo pasó, tal vez dos, antes de que sus aturdidos tímpanos estallasen al escuchar un nuevo grito, más fuerte que los anteriores, más desgarrador y que, de alguna forma, erizaba aún más su piel hasta hacer que su boca evocará una muca, pero no era más que una máscara de profundo terror y desconcierto. —¡Tairon! ¿Cómo has podido? ¡Alguien que me ayude! Tairon acaba de lanzar a Tobias por el agujero. Lo he visto con mis propios ojos. ¡Ayuda, alguien que lo atrape! —la voz de la anciana ahora parecía fortificada. No podía permitir que la culparan por lo sucedido. Nadie cuestionaría su mentira. Seguía gritando y corriendo por los pasillos, mientras las pisadas de las monjas podían oírse cada vez más cerca. —¡Niño! ¿Qué has hecho? ¿Cómo has podido hacer algo así y aún estar sonriendo? Eres un demonio—dijo un fraile que rápidamente llegó al lugar. Tairon lloró por primera vez en su vida. Acababa de perderlo todo: a su amigo, su única familia, su recompensa que ya casi no le importaba, su frágil cordura y casi con seguridad también su libertad. 

Escritores Uruguayos

En el barrio solo había dos niños: Tairon y Tobias. Podíase verlos jugar juntos en todo momento, ya fuese en la escuela, junto al río, recorriendo los interminables callejones del barrio o, muy de vez en cuando, en la casa de Tobias. No compartían sangre ni siquiera se parecían el uno al otro, mas eran hermanos. Fue por ello que Tairon pudo hacerse un lugar en la familia de Tobias. Tairon creció sin padres, y miraba con altanería a cualquier tipo de autoridad, salvo a Tiffany. Admiraba profundamente a esa mujer y a menudo soñaba que le adoptaba, permitiéndole al fin ser ese hermano que Tobias nunca tuvo. Muy temprano, cuando el sol apenas hacía intentos de salir, salieron a buscar leña, esperando sorprender a la familia de Tobias, el menor de los dos, dejando el fogón encendido a primera hora, pronto para calentar el famoso chocolate caliente de la señora Tiffany. Salieron en silencio, pues no podían decir a nadie o arruinarían la sorpresa, lo cual aterraba a Tobias, temeroso de ocultar cosas a su familia. Tairon no le dio importancia. En lo único que podía pensar era en ese preciado chocolate caliente, cuyo aroma aún se colaba en sus sueños, evocando el impecable y dulce sabor de inviernos pasados. Bajaron el empinado camino de piedra que cruzaba junto al enrejado patio del convento, desviándose por una arbolada que llevaba hasta la orilla del río. No hacía mucho, esta orilla había sido podada para que los caballos pudiesen beber, así que solo tenían que recolectar las ramas secas. Aun así, Tairon llevaba su facón bien ceñido a la cintura. Esto se debía a que Tairon, el mayor de los dos, había encontrado en la parte alta del cerro, cerca de la zona más alejada detrás del viejo recinto de mujeres, un árbol de coronilla. Llevaba meses guardando este secreto para un día frío como aquél y lo ocultó a Tobias por miedo a que robara su idea o divulgara la información. Alguien podría robarle su árbol, y no podía tomar ese riesgo, pensó. Aún estaba muy oscuro para ver bien el camino. Tairon tomó la mano de Tobias y lo guió como quien ayuda a un niño a cruzar la calle. Tobias no ofreció resistencia alguna, pues Tairon solía hacer cosas como esta todo el tiempo, y se dejó llevar casi por reflejo. Siguieron un viejo sendero entre árboles espinosos, hasta llegar al borde de la pendiente. Muy arriba, parcialmente cubierto por los árboles, se veía el campanario. Ambos subieron con dificultades, quebrando algunas ramas. La empinada superficie del cerro, a espaldas de la gran posada, estaba tan forrada y resbalosa que incluso estando descalzo resultaba difícil treparla. Para suerte de Tairon, él casi siempre andaba descalzo, a diferencia de Tobias, quien subía con dificultades. La vivienda ahora parecía ser mil veces más grande, y su inmensidad crecía con cada paso. Casi en la cima, era tan inclinado que debían agarrarse de las ramas para no caer de espaldas. Pasaron los minutos y al fin se toparon con un gran muro de piedra que parecía infranqueable sin importar en qué dirección se mirase. Más que un convento, parecía un fuerte colonial, lo cual no era desconcertante, ya que había sido construido durante una época de conflicto como la del lejano 1812. —Ya no quiero estar aquí —dijo Tobias, con la voz temblorosa, ya fuese por el frío o por el miedo a contradecir a Tairon. —Debe estar cerca, recuerdo perfectamente dónde lo vi —dijo Tairon con un tono nervioso e inseguro. Caminaban apoyados en el muro trasero del lugar, agarrándose de las pequeñas imperfecciones en las piedras que conformaban la estructura. Cualquier desliz o ruptura de la deteriorada piedra significaría una cruel caída hasta los pies del cerro. Ambos sabían que morirían antes de dejar de rodar, mas esto no asustaba a Tairon, quien veía cada vez más cerca su premio. Los pequeños brazos de Tobias ya estaban cansados. El sol empezaba a salir y poco a poco el plan comenzaba a tambalearse, al igual que sus cansadas piernas. —Ya es tarde. Mis padres ya deben haberse levantado y, aunque no lo hubieran hecho, seguramente lo harán en el tiempo que nos toma encontrar, cortar y llevar ese maldito árbol. ¡Bajemos a buscar algunas ramas! —dijo Tobias con un tono furioso y ya mucho menos titubeante. —¿Acaso no te das cuenta? Ahora, con la luz del sol, será mucho más fácil encontrarlo. Cuando lleguemos, nos darán una recompensa enorme. ¿Acaso no es ese el punto? ¿Por qué rendirse ahora y dejar que todo esto haya sido una pérdida de tiempo? Quizás hasta verían mi verdadero valor y me adoptarían, como siempre debió ser. ¿No te gustaría que fuésemos hermanos de verdad? —respondió Tairon con un tono calmado y taxativo. —No hace falta que esperemos, esto ya es una pérdida de tiempo. Si bajamos a recolectar las ramas, podríamos recuperar algo del tiempo perdido. Las vi cuando entramos aquí. ¿Acaso no te das cuenta de que la recompensa sería la misma? Somos solo niños. Nos recompensarían aunque fuésemos con las manos vacías. Además, mi intención es hacer feliz a mi familia. No me importa ningún premio. No lo entenderías. Nunca te han amado de verdad. Alguien que solo piensa en recompensas por sus acciones nunca sería adoptado por mi madre. Aun así, no podemos darnos el lujo de alimentar otra boca, estás soñando despierto. Los he escuchado hablar. Ni siquiera quieren que esté contigo. Siempre me dicen... —Tobias no dejaba de refunfuñar y parlotear cada vez más fuerte. Empezaba a confesar todo lo que hasta el momento había ocultado por miedo, ya que el nuevo e inminente terror a morir rodando era mucho mayor que el miedo hacia Tairon, permitiéndole expresar con total fluidez todos sus pensamientos. Su voz resonaba en los oídos de Tairon como un molesto zumbido. De inmediato pensó en empujarlo, tomarlo por las manos y lanzarlo al vacío como un costal de huesos. Sería muy sencillo para él realizarlo, simplemente debía decir que tropezó por sí mismo o, mejor aún, fingir que nunca lo vio. Nunca encontrarían el cuerpo y no habría forma de vincularlo al asesinato. Rodaría, quebrándose los brazos, clavándose las ramas y espinas en el cuerpo hasta romperse la columna y terminar moribundo en el suelo. Por supuesto, fingiría buscarlo en esa zona y diría que allí no estaba. Podría hasta llorar su pérdida. Al final, tomaría el lugar de Tobias. No sería una boca más que alimentar, solo sería un intercambio, una forma de consolar la terrible pérdida de la familia. El resultado más lógico para todos. Sí, la idea se hacía cada vez más real en su mente. Cada pequeño detalle se tallaba entre los rincones más nauseabundos de su conciencia. De inmediato pudo verlo con claridad frente a él. Al fin todo había terminado. Podían poner fin a esto. Tairon giró su cuerpo para estar frente a Tobias. Tenía los ojos abiertos como dos grandes platos y una sonrisa horripilante de oreja a oreja. Su moreno rostro lleno de cicatrices era suficiente para asustar a Tobias, mas esa aterradora sonrisa le dejaba la piel de gallina. —¡Te lo dije, Tobias! Te dije que lo encontraría. Eres muy impaciente. Siempre haces lo mismo. ¿Debes sentirte como un idiota, no? No entiendo por qué siempre te empeñas en contradecirme. Te lo dije, todo lo que hace falta es un poco de luz —Tairon estaba casi gritando, sin poder evitar hacer siniestras muecas con la boca. Por su cara corrían largas gotas de sudor y casi se podía escuchar cómo su acelerado corazón latía. El corazón de Tobias latía aún más rápido, hasta que pudo entenderlo; todo había terminado al fin. Sintió un ligero alivio y se arrepentía en su interior por todo lo que había dicho. Al fin pudo verlo. Frente a sus ojos estaba el dichoso lugar. En el muro había un inmenso agujero, seguramente destrozado por pesada artillería durante la guerra. Al entrar, ambos lo vieron. El inmenso árbol era apenas un poco más alto que los ya inalcanzables muros de piedra. Su robusto tronco era tan grande que fácilmente una familia podía vivir en él. Sus alargadas ramas se entrelazaban en el aire y llegaban hasta los claustros, donde se enrollaban produciendo una sombra perfecta en el gigantesco patio del recinto. Metido dentro del inmenso árbol crecía un enorme árbol de coronilla. Mucho más modesto, por supuesto, pero sus ramas eran lo suficientemente gruesas como para alimentar bien el fuego. —Estás loco, Tairon. Ese árbol está en el patio del convento. ¿Cómo piensas cortarlo sin ser escuchado por las monjas? Es más, ni siquiera deberíamos meternos en este lugar. Solo haces que me meta en problemas. Si nos preguntaran de dónde sacamos la leña, estaríamos muertos —dijo Tobias, vociferando gritos de furia nunca antes suscitados por él. —Cállate, harás que nos descubran —dijo Tairon apresurado. —¿Qué creen que están haciendo? Este no es lugar para niños, váyanse de aquí antes de que llame a sus padres. ¿Acaso eres tú, Tobias? —clamó una ronca y muy silenciosa voz desde los claustros superiores. Tairon apenas pudo escuchar bien las palabras. En cambio, Tobias ni siquiera lo pensó. Intentó escapar sin entender del todo desde dónde lo veían o qué habían dicho exactamente. Solo había distinguido su propio nombre. Al decirlo, fue como si la mujer hubiese activado una parte de su cerebro que siempre estaba apagada. Una indescriptible energía surgió en su cuerpo, y la adrenalina corrió por sus venas como si hubiera sido directamente inyectada en su corazón. Corrió a través del muro, y fue ahí cuando recordó la increíble altura en la que se encontraba. Cerró los ojos y extendió sus manos, sabiendo que ya no había nada que hacer. Su última vista fueron unas piedras en forma de pico y un frondoso árbol de espinas. Tairon no movió ni un músculo. Escuchó el desgarrador grito de Tobias. Mientras sus manos temblaban y su piel se erizaba, podía escuchar claramente cómo crujían los huesos de su amigo, cómo la piel se desgarraba, cómo las articulaciones se torcían en posiciones inhumanas, mientras sus músculos se estiraban hasta desgarrarse y producir largos gemidos por toda su piel. En el mejor de los casos, pensó Tairon, esos solo serían los sonidos de ramas quebrándose y atravesando la delgada piel de su amigo como si fuera desgastada tela. El alarido y el llanto se hacían cada vez más tenues hasta que no hubo más que silencio. Tairon se sintió, por un segundo, aliviado al ya no escuchar esos horribles gritos de ayuda. Un segundo pasó, tal vez dos, antes de que sus aturdidos tímpanos estallasen al escuchar un nuevo grito, más fuerte que los anteriores, más desgarrador y que, de alguna forma, erizaba aún más su piel hasta hacer que su boca evocará una muca, pero no era más que una máscara de profundo terror y desconcierto. —¡Tairon! ¿Cómo has podido? ¡Alguien que me ayude! Tairon acaba de lanzar a Tobias por el agujero. Lo he visto con mis propios ojos. ¡Ayuda, alguien que lo atrape! —la voz de la anciana ahora parecía fortificada. No podía permitir que la culparan por lo sucedido. Nadie cuestionaría su mentira. Seguía gritando y corriendo por los pasillos, mientras las pisadas de las monjas podían oírse cada vez más cerca. —¡Niño! ¿Qué has hecho? ¿Cómo has podido hacer algo así y aún estar sonriendo? Eres un demonio—dijo un fraile que rápidamente llegó al lugar. Tairon lloró por primera vez en su vida. Acababa de perderlo todo: a su amigo, su única familia, su recompensa que ya casi no le importaba, su frágil cordura y casi con seguridad también su libertad. 

Sobre el mastín que me ladra incansablemente a diario: pues que perros que conociéndome perfectamente me han seguido ladrando, que yo me acuerde, únicamente son 2, los 2 hembras, una de una perrera que había y que ya la quitaron y la mascota de una mujer mayor. En los últimos días le ha regañado la dueña de la misma para que no ladre. Por sitios que no paseo habitualmente, me ladran pero es sin apenas conocerme.

El embarazo es una experiencia transformadora que puede tener un impacto significativo en la salud mental. Mientras que para muchas mujeres es un periodo de alegría y anticipación, también puede ser una época de estrés, ansiedad y cambios emocionales intensos. Es fundamental abordar la salud mental durante el embarazo para garantizar el bienestar tanto de la madre como del bebé.
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Factores que Afectan la Salud Mental Durante el Embarazo

Durante el embarazo, las mujeres pueden experimentar una amplia gama de emociones debido a los cambios hormonales, físicos y psicológicos. La ansiedad por la salud del bebé, el miedo al parto y las preocupaciones sobre la transición a la maternidad son comunes. Las mujeres también pueden enfrentar desafíos como el rechazo o la falta de apoyo de sus parejas o familias, problemas financieros y cambios en la identidad personal.
Las mujeres con antecedentes de problemas de salud mental, como depresión o ansiedad, pueden estar en mayor riesgo de experimentar dificultades durante el embarazo. Además, el embarazo puede reactivar traumas pasados o exacerbar trastornos preexistentes, lo que requiere una atención cuidadosa y especializada.
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Consecuencias de la Salud Mental No Tratada

La salud mental no tratada durante el embarazo puede tener consecuencias graves para la madre y el bebé. La depresión prenatal puede llevar a un mayor riesgo de depresión posparto, afectando la capacidad de la madre para cuidar y vincularse con su bebé. La ansiedad y el estrés extremos también pueden influir en el desarrollo del bebé, aumentando el riesgo de parto prematuro y bajo peso al nacer.
Además, la salud mental no tratada puede afectar las decisiones de salud de la madre, como el cuidado prenatal y los hábitos de estilo de vida, que son cruciales para un embarazo saludable. Es esencial que las mujeres reciban el apoyo y el tratamiento adecuados para manejar estos desafíos.

Estrategias para Mantener la Salud Mental Durante el Embarazo

Mantener la salud mental durante el embarazo requiere un enfoque integral. Es importante que las mujeres tengan acceso a un sistema de apoyo sólido, que incluya a familiares, amigos y profesionales de la salud. La comunicación abierta sobre los sentimientos y preocupaciones puede aliviar el estrés y la ansiedad.
La terapia es una herramienta valiosa para manejar la salud mental durante el embarazo. La terapia cognitivo-conductual (TCC) puede ser especialmente útil para abordar los pensamientos negativos y desarrollar estrategias de afrontamiento efectivas. Los grupos de apoyo para mujeres embarazadas también pueden ofrecer una red de comprensión y compañerismo.
La práctica de técnicas de relajación, como el yoga prenatal y la meditación, puede reducir el estrés y promover el bienestar emocional. Mantener una dieta equilibrada, hacer ejercicio regularmente y asegurar un buen descanso también son fundamentales para la salud mental durante el embarazo.

Conclusión

La salud mental durante el embarazo es un aspecto crucial del bienestar materno e infantil. Con el apoyo adecuado, el acceso a la terapia y la práctica de técnicas de relajación, las mujeres pueden manejar los desafíos emocionales del embarazo y asegurar una experiencia más saludable y positiva.
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Durante el embarazo, las mujeres pueden experimentar una amplia gama de emociones debido a los cambios hormonales, físicos y psicológicos. La ansiedad por la salud del bebé, el miedo al parto y las preocupaciones sobre la transición a la maternidad son comunes. Las mujeres también pueden enfrentar desafíos como el rechazo o la falta de apoyo de sus parejas o familias, problemas financieros y cambios en la identidad personal.
Las mujeres con antecedentes de problemas de salud mental, como depresión o ansiedad, pueden estar en mayor riesgo de experimentar dificultades durante el embarazo. Además, el embarazo puede reactivar traumas pasados o exacerbar trastornos preexistentes, lo que requiere una atención cuidadosa y especializada.
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La salud mental no tratada durante el embarazo puede tener consecuencias graves para la madre y el bebé. La depresión prenatal puede llevar a un mayor riesgo de depresión posparto, afectando la capacidad de la madre para cuidar y vincularse con su bebé. La ansiedad y el estrés extremos también pueden influir en el desarrollo del bebé, aumentando el riesgo de parto prematuro y bajo peso al nacer.
Además, la salud mental no tratada puede afectar las decisiones de salud de la madre, como el cuidado prenatal y los hábitos de estilo de vida, que son cruciales para un embarazo saludable. Es esencial que las mujeres reciban el apoyo y el tratamiento adecuados para manejar estos desafíos.

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Mantener la salud mental durante el embarazo requiere un enfoque integral. Es importante que las mujeres tengan acceso a un sistema de apoyo sólido, que incluya a familiares, amigos y profesionales de la salud. La comunicación abierta sobre los sentimientos y preocupaciones puede aliviar el estrés y la ansiedad.
La terapia es una herramienta valiosa para manejar la salud mental durante el embarazo. La terapia cognitivo-conductual (TCC) puede ser especialmente útil para abordar los pensamientos negativos y desarrollar estrategias de afrontamiento efectivas. Los grupos de apoyo para mujeres embarazadas también pueden ofrecer una red de comprensión y compañerismo.
La práctica de técnicas de relajación, como el yoga prenatal y la meditación, puede reducir el estrés y promover el bienestar emocional. Mantener una dieta equilibrada, hacer ejercicio regularmente y asegurar un buen descanso también son fundamentales para la salud mental durante el embarazo.

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Durante el embarazo, las mujeres pueden experimentar una amplia gama de emociones debido a los cambios hormonales, físicos y psicológicos. La ansiedad por la salud del bebé, el miedo al parto y las preocupaciones sobre la transición a la maternidad son comunes. Las mujeres también pueden enfrentar desafíos como el rechazo o la falta de apoyo de sus parejas o familias, problemas financieros y cambios en la identidad personal.
Las mujeres con antecedentes de problemas de salud mental, como depresión o ansiedad, pueden estar en mayor riesgo de experimentar dificultades durante el embarazo. Además, el embarazo puede reactivar traumas pasados o exacerbar trastornos preexistentes, lo que requiere una atención cuidadosa y especializada.
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La salud mental no tratada durante el embarazo puede tener consecuencias graves para la madre y el bebé. La depresión prenatal puede llevar a un mayor riesgo de depresión posparto, afectando la capacidad de la madre para cuidar y vincularse con su bebé. La ansiedad y el estrés extremos también pueden influir en el desarrollo del bebé, aumentando el riesgo de parto prematuro y bajo peso al nacer.
Además, la salud mental no tratada puede afectar las decisiones de salud de la madre, como el cuidado prenatal y los hábitos de estilo de vida, que son cruciales para un embarazo saludable. Es esencial que las mujeres reciban el apoyo y el tratamiento adecuados para manejar estos desafíos.

Estrategias para Mantener la Salud Mental Durante el Embarazo

Mantener la salud mental durante el embarazo requiere un enfoque integral. Es importante que las mujeres tengan acceso a un sistema de apoyo sólido, que incluya a familiares, amigos y profesionales de la salud. La comunicación abierta sobre los sentimientos y preocupaciones puede aliviar el estrés y la ansiedad.
La terapia es una herramienta valiosa para manejar la salud mental durante el embarazo. La terapia cognitivo-conductual (TCC) puede ser especialmente útil para abordar los pensamientos negativos y desarrollar estrategias de afrontamiento efectivas. Los grupos de apoyo para mujeres embarazadas también pueden ofrecer una red de comprensión y compañerismo.
La práctica de técnicas de relajación, como el yoga prenatal y la meditación, puede reducir el estrés y promover el bienestar emocional. Mantener una dieta equilibrada, hacer ejercicio regularmente y asegurar un buen descanso también son fundamentales para la salud mental durante el embarazo.

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Las mujeres con antecedentes de problemas de salud mental, como depresión o ansiedad, pueden estar en mayor riesgo de experimentar dificultades durante el embarazo. Además, el embarazo puede reactivar traumas pasados o exacerbar trastornos preexistentes, lo que requiere una atención cuidadosa y especializada.
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La salud mental no tratada durante el embarazo puede tener consecuencias graves para la madre y el bebé. La depresión prenatal puede llevar a un mayor riesgo de depresión posparto, afectando la capacidad de la madre para cuidar y vincularse con su bebé. La ansiedad y el estrés extremos también pueden influir en el desarrollo del bebé, aumentando el riesgo de parto prematuro y bajo peso al nacer.
Además, la salud mental no tratada puede afectar las decisiones de salud de la madre, como el cuidado prenatal y los hábitos de estilo de vida, que son cruciales para un embarazo saludable. Es esencial que las mujeres reciban el apoyo y el tratamiento adecuados para manejar estos desafíos.

Estrategias para Mantener la Salud Mental Durante el Embarazo

Mantener la salud mental durante el embarazo requiere un enfoque integral. Es importante que las mujeres tengan acceso a un sistema de apoyo sólido, que incluya a familiares, amigos y profesionales de la salud. La comunicación abierta sobre los sentimientos y preocupaciones puede aliviar el estrés y la ansiedad.
La terapia es una herramienta valiosa para manejar la salud mental durante el embarazo. La terapia cognitivo-conductual (TCC) puede ser especialmente útil para abordar los pensamientos negativos y desarrollar estrategias de afrontamiento efectivas. Los grupos de apoyo para mujeres embarazadas también pueden ofrecer una red de comprensión y compañerismo.
La práctica de técnicas de relajación, como el yoga prenatal y la meditación, puede reducir el estrés y promover el bienestar emocional. Mantener una dieta equilibrada, hacer ejercicio regularmente y asegurar un buen descanso también son fundamentales para la salud mental durante el embarazo.

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Durante el embarazo, las mujeres pueden experimentar una amplia gama de emociones debido a los cambios hormonales, físicos y psicológicos. La ansiedad por la salud del bebé, el miedo al parto y las preocupaciones sobre la transición a la maternidad son comunes. Las mujeres también pueden enfrentar desafíos como el rechazo o la falta de apoyo de sus parejas o familias, problemas financieros y cambios en la identidad personal.
Las mujeres con antecedentes de problemas de salud mental, como depresión o ansiedad, pueden estar en mayor riesgo de experimentar dificultades durante el embarazo. Además, el embarazo puede reactivar traumas pasados o exacerbar trastornos preexistentes, lo que requiere una atención cuidadosa y especializada.
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Consecuencias de la Salud Mental No Tratada

La salud mental no tratada durante el embarazo puede tener consecuencias graves para la madre y el bebé. La depresión prenatal puede llevar a un mayor riesgo de depresión posparto, afectando la capacidad de la madre para cuidar y vincularse con su bebé. La ansiedad y el estrés extremos también pueden influir en el desarrollo del bebé, aumentando el riesgo de parto prematuro y bajo peso al nacer.
Además, la salud mental no tratada puede afectar las decisiones de salud de la madre, como el cuidado prenatal y los hábitos de estilo de vida, que son cruciales para un embarazo saludable. Es esencial que las mujeres reciban el apoyo y el tratamiento adecuados para manejar estos desafíos.

Estrategias para Mantener la Salud Mental Durante el Embarazo

Mantener la salud mental durante el embarazo requiere un enfoque integral. Es importante que las mujeres tengan acceso a un sistema de apoyo sólido, que incluya a familiares, amigos y profesionales de la salud. La comunicación abierta sobre los sentimientos y preocupaciones puede aliviar el estrés y la ansiedad.
La terapia es una herramienta valiosa para manejar la salud mental durante el embarazo. La terapia cognitivo-conductual (TCC) puede ser especialmente útil para abordar los pensamientos negativos y desarrollar estrategias de afrontamiento efectivas. Los grupos de apoyo para mujeres embarazadas también pueden ofrecer una red de comprensión y compañerismo.
La práctica de técnicas de relajación, como el yoga prenatal y la meditación, puede reducir el estrés y promover el bienestar emocional. Mantener una dieta equilibrada, hacer ejercicio regularmente y asegurar un buen descanso también son fundamentales para la salud mental durante el embarazo.

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Resulats que en mi gimnasio hay una mujer madura que me parece atractiva y pues no sé cómo hacer arme a hablarle me ayudan ?

Para que puedan comprender les explicaré un poco de mi pasado y presente. Tengo 22 años, llevo más de 5 años y medio de relación con mi novia. Siempre he sido delgado, alto, con un rostro fino (no soy guapo, soy bonito).
Desde que tengo memoria siempre se me a cuestionado todo lo que hacía o no hacia, mis gustos, mis sentimientos. Hablo literalmente desde mis 3 años, cuando mi padre me decía que yo debí de haber sido niña porque igual ya lloraba por todo (no sé ustedes pero me parece normal que u Niño de 3 años llore cuando se le hace sentir mal). También recuerdo cuando mi padre me decía que iba a dejarme a mi lugar: el centro de la ciudad donde se encuentran las sexoservidoras porque yo era un m@ric@. Durante secundaria, después de tanto hostigo no solo por parte de mi familia pero si no también por parte de mi alrededor (como “amistades”) realmente me cuestione si yo era g@y o no. A lo que la respuesta fue, y sigue siendo un honesto “no”, en realidad jamás he sentido alguna atracción por los hombres. Una vez esto claro acepte la realidad de las cosas, que la gente a mi alrededor siempre hablara, siempre opinara, inclusive siendo mi familia y que solo me restaba ser feliz.
(14-22 años) Acepte mi forma de ser, mi físico, use ropa de colores pasteles (rosa, azul celeste) que personalmente me gustan mucho, y cuando la gente me preguntaba si era gay les respondía con tranquilidad que no, ya que en realidad no me molestaba y no me ofendía. Tampoco fue un problema para tener a una mujer que me gustara así que no había mucho más que hablar sobre mi dolor y cicatrices el pasado.
Hace unos meses con mi novia, ella entendió con algo de lo que dije que yo deseaba estar con un hombre cxualmente. Y saben después de 5 años y con ese pasado enterrado no me esperaba 2 cosas. La primera, que el dolor siguiera ahí. Segundo, que después de tanto tiempo, de tantas veces que hicimos el amor y casi 7 años de conocerme a mi novia se le fuera a ocurrir que yo deseaba estar con un hombre. La verdad eso me lastimo horrible, duramos tres meses sin tener relaciones (eso es bastante tiempo en mi relación) porque yo me sentía muy mal emocionalmente. Duramos días sin hablar también porque yo la ignoraba, y saben me dolió tanto que me dio rabia, ya que siempre me han dicho que creen que soy gay porque soy diferente a los demás hombres. Por que soy amable, caballeroso, atento, porque busco ayudar a las personas y yo me pregunto, entonces que quiere la sociedad para que me pueda considerar hombre?, que sea un patan? Que sea infiel?. Llegue a un punto en el que solo quiero probarme a mi mismo y a mi novia que soy hombre, simplemente quiero estar con otra mujer para ver si así me va a decir hombre. Mi ropa de colores “femeninos” la tire a la basura desde ese día, les juro que el simple echo de verme al espejo me daba vergüenza y me daban ganas de llorar, de igual manera que lo hacía el estar entre multitudes de gente, sintiéndome observado o juzgado. La última persona en el mundo que espere cuestionara mi sexualidad era mi novia. Hace unos días hicimos el amor después de mucho tiempo, estuvimos juntos más de 3 horas y les puedo decir que hice mi mayor esfuerzo por que quedase satisfecha, no me preocupe por mi placer en ningún momento, al decir verdad ni si quiera logre terminar. Pero saben que? Creo que solo lo hice para mostrarle que soy lo suficientemente hombre, creo que solo lo hice por mi ego, porque en realidad ni si quiera lo disfrute, la escuchaba gritar, casi llorar de placer, y no parecía importarme, cómo si una parte mía no estuviese ahí. No se que hacer, realmente la amo y es una gran mujer pero me siento muy lastimado, termino este párrafo llorando. Gracias a todos por su tiempo, los leeré, lo que gusten escribir será bien recibido.

Tengo 20 y me gustaría salir con mujeres mayores, que consejos me dan y donde puedo encontrar

Bueno, es la primera vez que hago esto pero de verdad necesito un consejo. Mi madre siempre fue explosiva, de niñas sufrimos muchas cosas que, aunque no queramos, nos dejo traumas y algunas secuelas, pero jamás le di importancia. Admito que jamás fui conocedora de lo difícil que es ser adulto, mi madre siempre hacía todo sola, jamás nos enseñó cómo trabajar o cosas que ella sabía, siempre nos intentó mantener fuera de ese mundo, y para mi mala suerte, pensé que yo me iría de la casa al terminar mi universidad y estar un poco estable, al menos eso es lo que decía ella.
Desde hace mucho tiempo recuerdo que mi mamá comentaba que estaba harta de ser madre, para ese contexto, tomemos en cuenta que ella se embarazó chica y pasó por un millón de cosas muy difíciles, sin apoyo, sola, su única inspiración éramos nosotros, aun así, el ambiente de donde ella venía era sumamente hostil, y por obvias razones, ella no sabía controlar su ira, impulsos, etc, y terminaba haciéndonos mucho daño, verbal, psicológicamente y físico. Nuestra relación se fue en declive desde que ella conseguí un novio que ADORABA, pero el era manipular, narcisista, mantenido y cruel, literalmente lo vimos una sola vez y de la nada vivíamos con un extraño y nuestra madre dejándonos totalmente de lado porque decía que merecía ser mujer, ahí pasaron muchas cosas horribles, y desde ahí, todo fue de mal en peor. Eso pasó hace unos años, pero después de eso los traumas de todos salieron a relucir. Unos años después mi hermano (tengo 2 hermanos, mi hermana mayor y el, que es el del medio) se fue de la casa, el siempre fue un niño problema, de verdad, en cuanto el se fue yo por fin tuve el valor de revelar que el abusaba de mi desde niña, y por primera vez, mi salud mental se desmoronó, al igual que la de mi madre. Con mis ataques constantes, los problemas de salud y mentales de mi hermana, y obviamente el cansancio de mi madre, ella no soporto, y ahora, después de mas de 3 años, ella decidió que no nos quería mas con ella. Me iré con mi hermana a un departamento, pero no se que hacer, no se buscar trabajo, no se como pagaré la comida, como mantendré mi escuela y mi futuro trabajo. Necesito consejos, de cómo empezar, que debo hacer? Que necesito para independizarme?

Nosotros teniamos una bella disposición...
El día de hoy...
Yo no...
No se los peleles esos por nada ahí se enroscan...
Van a seguir apostando... ahora si viene el vergazo...
Van a perder todo de todo..
Esos de las vergas de plástico...
Ya era para que los estuvieran amarrando a una hoguera chingona...
Un aleccionamiento...
Lo mejor... "UNA" hoguera chingona... de un solo hombre... su bateria de cabronas...
Si todas no crean que son las pendejas esas... es un secretito...
Así como es en la Fantasia... así una de esas ordena unas rotas de madre impresionantes... en realidad igual...
Por payasitos... andaban de pendejitos...
Pinches perros inconsientes... tantas mujeres enfermas...
Ya lo saben que yo nunca he sido el del pedo...
Le decía... bueno doctor preparese para regalar las vacunas... dijo que si... era para los gastos de operación hacer algo más que perdure...
Yo llegando a Japon...llega Erin... y se hace ahí... se manda a traer a Richard Stalhman...ya me contaron... lo dejaron de delegado... yo no creo nada hasta no ver no creer...
Los tienen bien trabucles... si no es así nadamas de ya y ya...
Aquí hay que resolver el pedo...
Si no violaron a una perra... caras de verga...

Básicamente todo empezo desde los 10 casi 11 cuando empecé a tener interés sobre la sexualidad y a sentir atracción hacia las chicas pensé que eso era normal ya que veía a las personas con pareja pero todo cambio cuando entre a la secundaria a los 12 conocí a mi amigo Alejandro (tengo la historia más detallada en mi perfil como mi primer relación) empecé a sentirme atraído por el ya que pasabamos tiempo juntos, pero eso no era razón suficiente para sentirme atraído por el, total es hombre y yo también a ambos nos deben gustar las chicas cierto.......
Y así anduve con esa incertidumbre hasta que un día el y yo nos besamos mientras cocinabamos y ese mismo día tuvimos relaciones para mí después de eso sentí culpa ya que pensé que era antinatural pase dos semanas así tratando de entenderlo no tuve tiempo para comprenderlo ya que tenía mi escuela, sufría bullying y mi amigo quería tener una relación conmigo así que acepte total no me disgusto hacerlo con el, después de un tiempo terminanos (lean esa historiaen mi perfil para comprender mejor) después de que terminamos y yo me cambiara de escuela todavía seguía sintiendome confundido y culpable por tener una relación con un hombre (que solo duró unos meses) digo fui feliz pero yo pensaba que no era normal digo me gustan las mujeres pero el es hombre y me gusto y sobre todo lo ame no puede estar pasando total soy hetero no?......
Después de eso estuve en negación por 2 años y medio en los cuales anduve solo con mujeres (lo se empeze mi vida sexual muy joven) trataba de demostrarme y convencerme Ami mismo que simplemente fue un error todo eso,que simplemente yo estaba mal y ya pero esa maldita duda, vacío he insatisfaccion me fue haciendo daño poco a poco llege al grado de sentir como si me clavaran cuchillas en la garganta y espalda y me inmovilizaran como si quisiera gritar "ayuda no se que me pasa" pero no podía total mi familia nunca me ayudó así que como eso iba a cambiar mi vida (cabe aclarar que yo ya sabía sobre los demás géneros pero lo negaba yo) y apesar de que me gustó ese tiempo de andar con solo chicas el vacío empeoraba.
Pero todo cambio cuando mi amiga me invitó a un trío ya que tenía la fantasía de acostarse con 2 hombres al mismo tiempo yo no me mostré entusiasmado pero ella insisto y me dijo que me tenía una sorpresa (cabe aclarar que ella no sabía por lo que pasaba) así que con curiosidad pero algo desanimado acepte, llegamos al hotel y ahí nos estaba esperando otro chico ya algo mayor que nosotros el tenía 18 así que fuimos al hotel y empezamos al principio yo no me sentía tan animado apesar de que mi amiga nos estaba haciendo oral ella lo notó así que tomo mi mano y me bajo al suelo a la altura del miembro del otro chico y me dijo ayúdame a hacer que se sienta bien a lo cual yo me quéde anonadado pero el otro chico me dijo "está bien soy bisexual" tras esas palabras simplemente me deje ir por el momento y lo hicimos terminamos los tres satisfechos y me sentía por primera vez en muchos años bien sin esa sensación de vacío al lo cual después de hacerlo camino a casa con mi amiga le pregunte esa era tu sorpresa? A lo que me respondio que si ya que me veía siempre serio y callado como si estuviera reprimido así que me invitó.
Tras oir eso le conté todo como me sentía y todo tras esto ella me dijo que era posiblemente bisexual y le dije "lo se gracias por ayudarme a aceptarme"y desde ahí empeze a tener encuentros con hombres y mujeres y también trans empezá a aceptarme y por fin me veía más bien de ánimos lo hice mas seguido ya que queria desquitar el el tiempo que pase sin aceptarme y a día de hoy le sigo agradecido a mi amiga y vivo más seguro de mi sexualidad y me acepte pero todavía quedaba una cosa y era que mi familia lo supiera pero eso es otra historia.
Gracias por su atención, tiempo y buen karma.

alerta de mucho texto
Bueno gente, resulta que hace dos años recién cumpliendo 18 decidí ayudar a un amigo (en aquellos entonces conocido) qué tenía una vida de perros, tenía una novia narcisista qué lo tenía manipulado hasta por debajo de la lengua, y lo supe porque esa maldita quiso joderme la vida (le termine haciendo una venganza nuclear) y al final lo saque de esa relación con mucho esfuerzo y ayuda, lo hice porque ese amigo mio estuvo al borde de colgarse por culpa de esta maldita escoria. suelo ser una persona muy estoica y no busco resolver todo lo que no esta a mi control, lo cual me hace llevar una vida muy tranquila, pero volviendo al tema, después de ayudar a mi amigo su vida mejoró radicalmente, comenzó a conocer nuevas personas y nos hicimos demasiado cercanos y todo (nos llevamos 2 años de diferencia) en este caso mi amigo esta muy cerca de cumplir 18, el problema viene qué ya me e ido dando cuenta el porque el siempre a tenido vida de perros y el porque se a hecho tan cercano a mi, últimamente el a confiado demasiado en mi, y hace poco me a contado una historia de la cual el al parecer tenía una beca de estudio y ni el sabia, su mamá en más de 5 años le robo aproximadamente 3850 dolares americanos, y el no se dio cuenta, le e dado consejos para que aproveche una mejor vida ya que esta a un mes de ser mayor de edad, le e dicho que cambie sus firmas y todo porque tener una madre así, es algo que va a estar en su contra, hasta el hace poco me admitió qué el técnicamente a vivido solo porque cuando el quiere progresar, conseguir algún tipo de trabajo o así, su mamá y su familia se ponen en su contra, a lo cual le dije que apenas cumpla 18 qué le valga mierda todo lo que su mamá le diga y así, el problema es que noto que tiene como un miedo hacía ella y su familia, tiene una familia grande y tiene más de 5 hermanos a como se, el siendo el menor de todos, lo que se me hace muy extraño y hasta cierto punto tenebroso es que el me cuenta que si va a sacar la cedula de mayor de edad, la mamá lo quiere acompañar (casi seguro que quiere buscar como ver si va a cambiar las firmas y buscar como usar esto para seguirle sacando dinero a pesar de ya tener cuenta independiente) a lo cual le dije que vaya un día a escondidas y no se deje, lo cual me doy cuenta que no responde a estos tipos de consejos, y siempre e sospechado qué algo más turbio pasa en su casa y cuenta no me doy, ya que lo más que me respondió después de estos mensajes es que "de por si mi mamá tiene copia de la cedula de todos mis hermanos" lo cual esto se me hace sumamente raro, turbio y buena espina no tiene nada, así que si, la verdad el es un amigo a lo cual yo velo mucho, el casi siempre viene a mi a contarme su vida, a jugar y absolutamente todas estas cosas, me a dicho que soy como la persona en la que más confía después de todo lo que lo ayude hace unos años atrás, así que no se si debería de actuar más, tal vez el este en peligro o algo más, no se que me recomiendan ustedes, porque más de consejos no puedo dar, considero yo.